APOYOS VISUALES: No es lo mismo FACILITAR que ACOMODAR.

 Existen un sinfín de opiniones respecto a la utilización de los apoyos visuales. A mí es un tema que, personalmente, me tiene bastante harta porque es tan obvio... Pero he llegado a la conclusión de que las opiniones negativas respecto a éstos son por puro desconocimiento a la manera de utilizarlos. Porque hay muchas formas de hacerlo, pocas bien y muchas mal. 

 La utilización de apoyos visuales, para que tenga resultado de éxito, no se trata en poner pictos a diestro y siniestro y nos quedamos tan anchos. Principal y necesariamente, conocer al niño y después, hacernos una serie de preguntas para su correcta ejecución:

-NIVEL DEL NIÑO CON LOS APOYOS VISUALES, es decir, cuánto tiempo lleva usándolos, tipos distintos de paneles, cómo los utiliza, destreza con ellos. A más de lo anterior más pictos podremos usar.

-PARA QUÉ LOS VAMOS A USAR, no es lo mismo que pretendamos que nos comunique, que en este caso se le confeccionaría una carpeta de comunicación, que un problema puntual de conducta, y aquí depende del problema se le harían desde historias sociales hasta economía de fichas.

-DÓNDE LOS VAMOS A USAR. Claro, si por ejemplo tenemos un problema de conducta en la alimentación necesitaremos un panel, a ser posible no muy grande porque ese panel tendrá que salir de casa una vez el tema en casa esté solucionado para que generalice en un restaurante, escuela o dónde sea. Sin embargo si es un problema de conducta, por ejemplo, cruzo la calle sin mirar, nos bastará con una hoja plastificada que llevaremos siempre que salgamos de casa.

-MOTIVACIÓN. Importantísimo, no hace falta ser diseñador gráfico para hacerlos, porque lo más importante es la motivación del niño y saber dónde le podemos “pillar” para que funcione.

 Se pueden corregir muy rápido ciertas conductas con ellos, que nos puedan comunicar desde un objeto que desean, un alimento que quieran tomar, corregir lenguaje mal estructurado y lo más importante y el principal motivo por el que debemos hacerlo, es la CORRECTA COMPRENSIÓN, que eso implica claramente una CORRECTA INTEGRACIÓN de lo que le estamos pidiendo, de qué debe de hacer, de que no hay caos ni ansiedad ninguna. Aunque tengan lenguaje entenderán mucho más rápidamente una entrada visual, ojo, acompañada siempre de la oral, para estimular el lenguaje, que simplemente la oral, porque a ellos las palabras se las lleva el viento y muchas veces estamos exigiendo cosas que no se cumplen NO POR CULPA DEL NIÑO, sino por la nuestra. 

 Pero como siempre, para facilitar la herramienta tenemos que estar formados, tener práctica y destreza en la misma, nunca dudar del niño, sino de nosotros mismos, que una cosa no funciona, habrá sido error nuestro, hay miles de formas de hacerlo pero pocas de hacerlo bien.

 Y no es lo mismo FACILITAR (que es lo que yo hago con Marc, le facilito la compresión) que ACOMODAR (que es lo que dicen los que están en contra de estas herramientas). Cuando los que pienso que se acomodan son ellos por no usarlos, porque eso si, es mucho trabajo. 

Que por usarlos no estamos impidiendo que nazca el lenguaje, porque a Marc le ha nacido teniendo la casa panelada, adaptada para él, lo que estamos impidiendo es la plena realización de las personas, su DERECHO a tener una herramienta imprescindible.